Arquitectura Art Nouveau en Bruselas

Varios arquitectos siguieron el estilo modernista en Bruselas, como Paul Hankar, Henry van de Velde y Paul Saintenoy, pero el pionero y  más famoso fue Victor Horta. La ciudad cuenta con más de 500 edificios de este estilo.

Victor Horta

(Gante, 1861 - Bruselas, 1947)

Con la Maison Tassel, edificada entre 1892 y 1893, intenta inventar un nuevo estilo y reaccionar ante la arquitectura ecléctica, dominante durante todo el siglo XIX, que se limitaba a copiar los estilos clásicos (eclectismo puro, neorománico, neogótico, neorrenacentista italiano, neorrenacentista flamenco, neotudor, neobarroco...).

Se trataba de un edificio unifamiliar erigido en Bruselas, donde prescindió del pasillo y de las habitaciones en fila creando espacios fluidos y dando un nuevo tratamiento al uso del hierro y del cristal, creando formas vegetales tanto en elementos arquitectónicos, como en el mobiliario. 

Más adelante edificó el Hotel Solvay (1895-1903), situado en Bruselas en el número 224 de la avenida Louise, en el que destaca su fachada simétrica hasta el nivel situado en torno a la puerta-ventana de la planta principal. Esta puerta da acceso a un balcón y está flanqueada por dos miradores. En la fachada se pueden encontrar los materiales favoritos de Horta: el vidrio, el hierro y la piedra natural. 

Dentro, una primera escalera provista de una barandilla en metal dorado conduce desde la planta baja a la planta principal donde se encuentran los espacios de recepción (salones en la fachada delantera y comedor en la trasera). Estos espacios están separados unos de otros por mamparas esmaltadas que pueden abrirse para crear un enorme espacio continuo en casi toda la superficie de la casa. Esta escalera lleva arriba una impresionante vidriera cuya curvatura garantiza también una distribución óptima del aire caliente proporcionado por las bocas de calefacción situadas al pie de la escalera. Bajo esta vidriera, una segunda escalera, permite alcanzar los pisos superiores, donde se encuentran las habitaciones y salas de baño.

Este palacete no fue el único encargo que la familia Solvay hizo a Victor Horta, ya que eran grandes mecenas e hicieron pedidos a otros grandes arquitectos de este período (no solamente a los más próximos, Horta entre otros, sino también a Paul Hankar, Henry van de Velde, Gustave Serrurier-Bovy, Ernest Blerot y Paul Cauchie). Victor Horta realizó por ejemplo para la sociedad Solvay, el pabellón para el Exposición Internacional Universal de 1905.

También realizó su propia casa, la Casa estudio Horta (1898-1901), en los números 23 y 25 de la Rue Américaine,  que obedece a la expansión urbana que experimentaba la capital belga a finales del siglo XIX, producto de la bonanza que le influyera la colonización del Congo a manos del rey Leopoldo II. Se trataba de dos edificios que fueron concebidos juntos y se comunican interiormente, teniendo cada uno su propia individualidad, distinguiendo la casa privada de la casa del taller. Las dos fachadas están bien diferenciadas, la parte de la izquierda pertenece a la residencia y la de la derecha al taller del arquitecto; en ambos casos la preeminencia de la estructura metálica y piedra. Esta obra es iluminada naturalmente desde su parte superior y desde la fachada principal y trasera, enmarcando así la construcción como una idea novedosa, ya que en aquella época la iluminación natural de la vivienda clásica se limitaba a los vanos que integraban las fachadas delanteras y traseras de las viviendas.

Hoy en día un museo dedicado al estilo Art Nouveau, el Museo Horta. 

Edmond van Eetvelde era el encargado de dirigir la antigua colonia belga del Congo. Brazo izquierdo de Léopold II, Van Eetvelde firmaba los contratos de explotación en el país africano y administraba las enormes cantidades de dinero que entraban a Bélgica por el hule. Como muchos políticos y burgueses de la época, le pidió a Victor Horta que le diseñara una casa que se saliera de lo común y que le permitiera organizar recepciones. A través de la residencia, en la que podían entrar cerca de 100 personas, el ex-secretario quería enseñar la "riqueza de la colonia": los interiores son de mármol y caoba; los muebles, diseñados por Horta, y en el centro de la sala principal hay una gran cúpula de luz con vitrales. En las paredes, los esgrafiados hacen referencia a la fauna y la flora de la colonia. 

Maison Beukman, Rue Faider 83

Victor Horta diseñó un gran edificio en Rue d'Arenberg de Bruselas donde se abriría en 1912 la joyería de los hermanos joyeros y orfebres Wolfers, que diseñaron joyas en el estilo Art Nouveau. 

También aplicó el nuevo estilo a otros edificios nacidos de los cambios sociales y económicos del siglo. Así entre 1896 y 1899 construyó su considerada obra maestra, la Casa del Pueblo (sede del Partido Socialista Belga), donde utilizó el vidrio como muro cortina en casi toda la fachada.

Entre 1901 y 1903 edifica, también en Bruselas, las casas taller de los escultores Pierre Braecke, en 31 Rue de l'Abdication, y Fernand Dubois, en 80 avenida Brugmann.

En Alemania, creó el gran almacén Grand Bazar (1903-1905) en Francfort-sur-le-Main, que fue demolido.

Su obra estaba definida por la luz, espacios abiertos, techos de vidrio y el innovador uso de trabajos de forja curvos, inspirados en las formas naturales, en los interiores y exteriores de edificios. Los encargos  de la Casa Tassel y del Hotel Solvay ejemplifican el enfoque pleno que adoptó hacia la arquitectura: Horta diseñó cada elemento, desde los picaportes hasta los muebles y las ventanas con vidrieras.

Varios de sus edificios están incluidos en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. 

Abrió su propia oficina en Bruselas en 1893. Un póster de 1894 de su amigo y colaborador frecuente, Adolphe Crespin, lo publicita. (A la izquierda)

Comenzó la construcción de su propia casa, Maison Hankar en la Rue Defacqzal, al mismo tiempo que Victor Horta construía la Maison Tassel, ambas consideradas las dos primeras casas construidas en estilo Art Nouveau. 

Es el suyo un estilo «art nouveau geométrico», distinto al «art nouveau floral» de Victor Horta. En su obra son característicos la utilización de materiales constructivos de diversos colores, el empleo del hierro forjado en rejas y balcones y ciertas reminiscencias orientales.

La fachada de la Casa Hankar expresa la estructura del edificio: el tercio oriental, que contiene la entrada y las escaleras, está compensado a medio piso de los dos tercios occidentales, que contienen las salas públicas. Un compartimento saliente de tres pisos, apoyado en ménsulas de piedra , proporciona mucha luz a las habitaciones del segundo y tercer piso y un balcón para el cuarto. Los paneles murales de Crespin aparecen debajo de las ventanas y en un friso con arcadas en los aleros.  

En 1896, presentó un proyecto para una "Cité des Artistes" (Ciudad de artistas) para la ciudad costera de Westende , una cooperativa de artistas con viviendas y estudios. Aunque el proyecto nunca se realizó, más tarde inspiraría a la Colonia de Artistas de Darmstadt en  Alemania y a los artistas de la Secesión de Viena . 

Realizó en la misma calle, en el número 71, la Casa del pintor Ciamberlani, con piezas acristaladas y gran interés por el cromatismo. El propio artista de origen italiano Alberto Ciamberlani, es el artífice de las pinturas y dibujos de la fachada. Las ventanas redondas son lo más llamativo de un edificio canónico.

Maison Aglave, Bruselas (1898)

Maison Hotel Hannon, Bruselas (1893)

Proyecto de ampliación de la Maison de Albert Kleyer, Rue Ruysbroeck, 21

 Antigua camisería (floristería en a actualidad) en la Rue Royale, Bruselas (1896)

Two screens (1897) para el Grand Hotel de Bruselas

Fue profesor de ingeniería en la Escuela de Artes Aplicadas de Schaerbeek (1891-1897) y profesor de historia de la arquitectura en el Institut des Hautes Etudes de la Universidad de Bruselas (1897-1901). Trabajó como editor de L'Emulation (1894-96), una revista que promovió el estilo Art Nouveau.

Posteriormente, la lectura de John Ruskin y la obra de William Morris le llevaron a reflexionar sobre la relación entre arte y sociedad, y centró desde entonces su actividad en el campo del diseño y la producción de objetos decorativos y muebles. 

Convertido en uno de los principales artífices del Art Nouveau, Van de Velde defendió sus ideas sobre el arte en escritos como El arte futuro (1895) y Observaciones generales para una síntesis de las artes (1895). Pensaba que todas las artes debían supeditarse a las artes decorativas, ya que mejorando el entorno del hombre, el hombre mejoraba. Por ese motivo diseñaba hasta el último detalle de sus espacios, componiendo sus obras en su totalidad, a través de una línea constructiva y utilitaria.

El marchante de arte judío alemán Siegfried Bing le ofreció decorar su nueva galería La Maison del Art Nouveau de Bing (París, 1895).

En 1896 diseña y construye su primera obra arquitectónica, la casa Bloemenwerf (el jardín de las flores) en Uccle, Bruselas, su propia residencia, en la que también diseñó el interior y el mobiliario.

El Otlet Hôtel (1894-1898), en el cruce entre la Rue de Florence y la Rue de Livourne en Bruselas, fue construido para el abogado y documentalista Paul Otlet, por el arquitecto Octave Van Rysselberghe con la ayuda de Henry van de Velde para la decoración de interiores (carpintería, vidrieras ...). La pieza central de su diseño interior, una vidriera con motivos florales, separa la sala de estar de la gran escalera y le proporciona luz adicional.

Hotel Otlet (1898), Bruselas

En Chemnitz, en la antigua Karl Marx Stadt, se encuentra la Villa Herber Esche (1902-1903) convertida en la actualidad en su museo monográfico. 

Villa Esche (1902-1903)

Lauring House en Scheveningen  (1903) en Holanda

Sanatorio de Trzebiechów (1905) en Polonia 

Aunque quizás su conjunto de edificios más prominentes sean los que realizó en Weimar, donde dirigió durante 15 años (antes de la Segunda Guerra Mundial), llamado por el gran duque de Sajonia, el Kunstgewerbeschule Institut (escuela de artes y oficios), que se convirtió en 1919 en la Bauhaus de Walter Gropius.  Es precisamente en Weimar donde su influencia en el terreno de la arquitectura y el diseño industrial se extendió gracias a las escuelas que fundó en Bélgica y Alemania.  Es en esta escuela donde se ha montado la gran exposición dedicada a Van de Velde y donde se puede entender su verdadera trascendencia.

Con la ayuda de sus amigos, compró una propiedad en las afueras de Weimar donde esperaba que sus cinco hijos pudieran crecer sin restricciones urbanas y sociales, rodeados de luz, aire y naturaleza. En 1907, Henry van de Velde diseñó la casa de su familia, desde los marcos hasta las lámparas de techo, a la que llamaba cariñosamente Haus unter den Hohen Pappeln por los altos álamos alrededor de la propiedad.

En Turingia y el sur de Alemania es donde se pueden descubrir algunas de sus obras más carismáticas, destacando en especial sus proyectos en Jena donde diseñó el Monumento dedicado a Ernst Abbe (1911) cofundador de la mítica Zeiss, donde se revolucionó la fabricación de lentes, y en Gera donde se puede admirar la preciosa Casa Schulenburg (1913). Por otro lado, en los museos de ambas ciudades se ponen en valor otras facetas del personaje como pintor, ceramista o fotógrafo, a través de varias exposiciones. 

Casa Schulenburg (1913)

Su personalidad estaba marcada por etapas de depresión y reclusión y otras de euforia e hiperactividad en las que lo hizo todo: textiles confeccionados en el pueblo alemán de Krefeld, cerámica y porcelana, lámparas, muebles y objetos de madera. Al contrario que Morris, no era un artesano, pero trabajaba con muchos de ellos y, al igual que el inglés, perseguía la democratización a través de la industria, aunque sus piezas fueron de edición más bien limitada.

Papel pintado, pieza de cerámica, lámpara de sobremesa, jarra o tetera y cerradura

Cubierta de la edición de Ecce Homo (1908) de Friedrich Nietzsche 

La Deutscher Werkbund (DWB) fue una asociación mixta de arquitectos, artistas e industriales, fundada en 1907 en Munich, por Hermann Muthesius. en la que convivían artistas como Henry van de Velde o Bruno Taut, tradicionalistas y artesanos como H. Tessenow y partidarios de la tipificación de la forma, de los objetos, de la arquitectura, como H. Muthesius, P. Behrens o W. Gropius. El Werkbund también presenció el conflicto entre el expresionismo y el racionalismo, anticipando y coincidiendo así con la misma Bauhaus, de la que fue precursora.

Bajo el lema «Vom Sofakissen zum Städtebau» (desde los cojines de los sofás a la construcción de ciudades), el Werkbund buscaba integrar los oficios tradicionales con las técnicas industriales de producción en masa a fin de poner a Alemania en un lugar competitivo con otras potencias tales como Gran Bretaña o los Estados Unidos. Buscaba una nueva expresión artística en la era de la máquina, con una componente importante de teoría, como todos los movimientos de principios del siglo XX.

En 1913, el Deutscher Werkbund encarga a Henry van de Velde, arquitecto, diseñador industrial y pintor belga, la construcción de un Teatro para la Exposición Werkbund de 1914 en Colonia, Alemania. Este encargo resultó muy controvertido debido a la nacionalidad extranjera de van de Velde. Sin embargo, gracias al apoyo del alcalde de Colonia, el Doctor Konrad Adenauer, el arquitecto logró construirlo. El teatro abrió sus puertas en julio de 1914, pero en septiembre el estallido de la Primera Guerra Mundial provocó su cierre para siempre, después de sólo tres meses, ya que fue demolido.

Teatro Exposición Werkbund, Colonia (1914)

La aportación teórica de Bruno Taut a los debates desarrollados en el Congreso del El Deutscher Werkbund, fundamentales para entender la construcción de la arquitectura modernista, tuvo su colofón en el Pabellón del Vidrio que construyó para la exposición homónima. El edificio, de planta circular, estaba coronado por una doble cúpula de cristal apuntada. Desde la planta superior podía verse a través de un hueco circular una cascada de vidrio amarillento sobre la que corría el agua. Una inscripción de P. Sheerbart servía de introducción al edificio, que el propio poeta entendía como el origen de una nueva arquitectura: la "Arquitectura de Cristal", es el título también de una obra suya publicada también en 1914. 

Pabellón del vidrio en la exposición del Deutscher Werkbund, en Colonia (1914)

Henry van de Velde fue evolucionando hacia el Racionalismo, mostrándose partidario de la ausencia de ornamentación. 

Museo Kröller-Müller (1936) en Holanda

Con la Segunda Guerra Mundial se trasladó a Holanda, y después de la misma se refugió en Suiza, donde murió escribiendo sus extensas memorias.  

El estilo arquitectónico de Paul Cauchie (Ath, 1875 - Etterbeek, 1952), al contrario que los de Victor Horta o Paul Hankar, que utilizaban hierro forjado y piedra para sugerir volutas vegetales, se caracteriza por un rigor geométrico compensado por la riqueza de las decoraciones pictóricas. 

Su obra arquitectónica es de las más reducidas: tres casas-taller en Bruselas, dos casas adosadas en la costa belga, así como la villa Dageraad (villa Aurora) en Eeklo, hoy catalogada. Amigo del arquitecto Édouard Frankinet, es notable la importancia y la influencia de este último sobre la arquitectura de Cauchie.

Dedica todo su esfuerzo a la decoración de fachadas y, en concreto, a la técnica del esgrafiado, recuperada por el movimiento art nouveau, de la que es el artesano más talentoso y prolífico de Bélgica. El esgrafiado es una técnica cuya práctica se remonta a la antigüedad, que consiste en elaborar un fresco mural decorativo raspando una fina capa de mortero de color. Cauchie, además de enseñar esta técnica, la utilizó en numerosas obras, como el friso del museo de Bellas Artes de Gante, los elegantes motivos de la casa Delune, los del antiguo almacén Delhaize o el paramento de una casa modernista en la avenida Malibran (Ixelles).

Su obra más conocida es la casa Cauchie, construida en 1905 para servir de vivienda y taller a Paul Cauchie y a su esposa Caroline Voets, pintora de talento apodada Lina. Considerada hoy una de las más bellas obras del modernismo en Bruselas, la casa contiene múltiples creaciones de la pareja: pinturas murales, decoraciones, bordados, muebles, lámparas y esgrafiados. 

En el barrio de Saint-Gilles, en el corto tramo entre la avenida de Jean Volders y la Chaussée de Waterloo, la calle Vanderschricken cuenta con 17 imponentes casas art nouveau, la llamada Séquence Blerot. Una maravillosa concentración del estilo. Detalles dorados, barandales ondulados, puertas de madera y esgrafiados adornan los edificios construidos entre 1900 y 1902 por el arquitecto Ernest Blerot (1870-1957). 

En la esquina con la avenida de Jean Volders, el restaurante La Porteuse d'Eau cuenta en el primer piso con una bella cúpula de vitrales.

Cúpula del restaurante La Porteuse d'Eau

En Henri Mausstraat 19, se encuentra el famoso Bar-restaurante Falstaff, que debe su nombre a un capitán de la marina inglesa amante del buen beber y comer en el que se inspiró el personaje de Falstaff en la obra "Enrique V" de William Shakespeare. Desde la calle llama la atención su imponente fachada de ventanales redondeados. El arquitecto y diseñador de interiores Émile Houbion -que trabajó con Víctor Horta- lo construyó en 1885 y el interior fue modificado en 1903. Conviene prestar atención a los detalles: los vitrales de flores en la parte superior de las ventanas, las lámparas de las salas, los contornos de madera de los espejos, el barandal de hierro y las separaciones de las distintas salas.

Josef Hoffmann 

(Pirnitz, Moravia 1870 - Viena 1956)  

Inicia sus estudios en el Instituto Superior de Artes y Oficios de Brno y realiza más tarde un año de aprendizaje en las Oficinas de construcción militar de Würzburg. Amplia su formación en la Akademie der Bildenden Künste bajo las enseñanzas de Otto Wagner y funda, junto con Olbrich, Czeschka, Koloman Moser, Leo Kainrald y otros, el Club de los Siete, confraternidad de amigos de las artes. Obtiene del Prix de Rome en 1895, gracias a su proyecto Forum Orbis, lo que le permite permanecer dos años en Italia.  

En 1897 entra a formar parte del estudio de Otto Wagner, donde colaboró con Olbrich en algunos proyectos para el ferrocarril Metropolitano. 

En 1898, Moser, Klimt, Moll y Hoffman fundaron en Viena la Seccesion, ocupándose Hoffman en un principio del montaje de las exposiciones organizadas por la asociación. Pretendían revalorizar el trabajo manual y artesanal, que se estaba viendo arrinconado por la producción industrial de las máquinas. Además, postulaban un alejamiento de los valores estéticos historicistas de la Academia para proponer la exploración de lenguajes modernos. 

En 1899 es profesor en la Kunstgewerbeschule de Viena, y en 1900 diseñó un interior en la Exposición Universal de París y funda la Wiener Werkstätte. 

Sus primeros encargos de arquitectura constituyeron una serie de casas en el HoheWarte a partir de 1902. El sanatorio de Purkersdorf (1904-1906), constituyó su primer trabajo arquitectónico importante con una simplificación extrema del despliegue arquitectónico y una anticipación del racionalismo.

El Palacio Stoclet, fue un encargo del banquero y coleccionista de arte Adolphe Stoclet, construido entre los años 1905 y 1911. Adolphe Stoclet, accionista de la Société Générale pour Favoriser L'industrie Nationale, estaba casado con Suzanne Stevens, hija del crítico y comerciante de arte Arthur Stevens. Esta unión reforzó un interés por el arte y la arquitectura. En uno de sus paseos vieneses, la pareja descubrió una villa en Hohe Warte, donde Hoffmann había construido una colonia de casas modernistas para artistas y partidarios de la Secession de Viena. Stoclet le da total libertad artística sin límites de presupuesto, y Hoffman y su equipo se lanzan a hacer realidad esta suntuosa utopía. El terreno disponible alcanza los 8.600 metros cuadrados, donde se crearon espléndidos jardines junto a los cuerpos edificados.

Está situada en la avenida de Tervuren 275-281, de Woluwe-Saint-Pierre, cerca de Bruselas. El acceso se realiza a través de una pérgola de columnas cuadradas sin capiteles que son el principio del orden visual que acompaña a la mayor parte de la casa, con una serie de estructuras repetitivas en la sucesión de habitaciones que se alejan del eje principal y empujan los límites de la construcción. El rigor de su aspecto exterior se ve matizado con el juego de las ventanas que rompen las líneas de cornisa, con el invernadero de la azotea y, sobre todo, con las esculturas en bronce de 4 varones desnudos, montados en la pieza que se eleva sobre el hueco de escaleras, obra del escultor Franz Metzner. 

Planta 1

Josef Hoffmann fue alumno de Otto Wagner y al igual que Wagner, sus obras tienen una especial claridad geométrica, algo que los distancia con la arquitectura exuberante y naturalista de Art Nouveau bruselense de Victor Horta. En este proyecto la fachada revestida de mármol es similar a las fachadas vienesas de Wagner, y por su esquematismo anticipa el desarrollo de ciertos aspectos compositivos de la arquitectura moderna. 

Así ocurre con el diseño de interiores, los tratamientos murales, el diseño de muebles y complementos. La decoración de la casa incluye la obra de una serie de artistas destacados, como Koloman Moser, Gustav Klimt, Frantz Metzner, Michael Powolny y Richard Luksch. Juntos crearon una residencia elegante, moderna y funcional al mismo tiempo.

El interior es impactante, todo está recubierto con mármol noruego, la armonía geométrica anticipa las líneas venideras del Art Deco, como ya hemos apuntados. Todo fue diseñado por Hoffman y la Wiener Werkstätte, desde los muebles, a la iluminación, desde la cristalería hasta la cuchillería de plata y la vajilla. 

El comedor que es una de las salas más lujosas de la casa, posee un friso de mosaicos de seis metros de ancho encargado a Gustav Klimt, quien lo llamó El Árbol de la Vida. Sus piezas están fabricadas en oro y en piedras semi-preciosas. La figura de la Expectación a la izquierda, se une con una pareja abrazada que nos adelanta su famoso Der Kuss (El Beso) y a la izquierda aparece El Caballero. 

La larga mesa posee veinticuatro sillas tapizadas en piel de reno, la acompañan zócalos de madera de ébano y mármol negro, sobre los que descansan cuencos incrustados con malaquitas y candelabros de plata con perlas.

Es la expresión definitiva del ideal de 'Gesamtkunstwerk' («obra de arte total»), participando tanto de referencias a las casas de campo inglesas como a los palacios barrocos centroeuropeos. Todo ello sin menoscabo de la presencia de modernas instalaciones, como electricidad, ventilación y calefacción. 

Es considerado como una Villa de la nueva burguesía, que trata de identificarse con las transformaciones de la Nueva Arquitectura, ofreciendo una síntesis de nuevas figuraciones con las viejas artesanías; componiendo una de las mansiones más suntuosas construidas en el siglo XX, al tiempo que muestra su carácter crepuscular y agónico, muy propio de buena parte de las realizaciones del fin de siglo donde se vislumbra tanto el final de un proceso como el nacimiento de otras realidades visuales. También entraría en conflicto con los nuevos conceptos de la habitabilidad que surgirían en los años siguientes: desde el Raumplan de Adolf Loos hasta 'la machine à habiter' de Le Corbusier. 

Supone la cumbre del Modernismo y jugó un papel importante en la representación de formas modernas de lujo, no sólo influyendo en el estilo del arquitecto francés Robert Mallet-Stevens, sobrino de Suzanne Stoclet y autor de la Villa de Noailles, sino que también se convirtió en un símbolo emblemático del posterior Art Deco y de la arquitectura de lujo modernista estadounidense entre los años 1920-1950. 

El señor Stoclet, junto a su esposa Suzanne vivieron ahí hasta su muerte en 1947, periodo en el que recibieron a grandes creadores vanguardistas de la época como Serguei Diaguilev, Jean Cocteau, Claude Debussy e Igor Stravinsky. 

Es Patrimonio de la Humanidad desde el año 2009. 

En 1912 Hoffman participó en la fundación del Werkbund austríaco.